Exposición planta 1 - arkeologiamuseoabibat
Ficha exposicion arqueologia planta 1
Primera planta: la Prehistoria
La exposición permanente recoge una pequeña parte de la colección del museo. Está organizada de manera cronológica y distribuida en tres plantas.
La primera planta explora la Prehistoria, desde nuestros orígenes hasta la aparición de los primeros metales.
Comenzamos viaje en el Paleolítico, el primer período y el más largo de la Historia, en el que mujeres y hombres vivían de la caza y la recolección. En las vitrinas podréis descubrir huesos de los animales que compartían espacio con nuestros antepasados y que fueron apareciendo y extinguiéndose debido a los diferentes cambios climáticos: marmotas, leopardos, rinocerontes, uros, ciervos, jabalís… También encontramos restos de las herramientas fabricadas en piedra por los humanos, y hasta un diente que perdió una niña o niño Neandertal hace unos 50.000 años.
Nuestra siguiente parada es el Mesolítico. Hace unos 11.500 años un clima similar al actual favoreció la expansión de los grupos humanos y la colonización del territorio. Habitaban en campamentos al aire libre y abrigos rocosos cerca de los ríos. Periódicamente se desplazaban en pequeños grupos hacia puntos estratégicos para la caza. El bosque era su principal fuente de recursos. Allí cazaban, recolectaban frutos, bayas y raíces, y se aprovisionaban de madera. De esta época conservamos numerosos fragmentos de sílex con forma geométrica, retocados y usados como puntas o en el cuerpo de las flechas, o como cuchillos. También nos dejaron los primeros adornos hallados en Álava, conchas marinas que podían formar collares o irían cosidas a las ropas.
Uno de los grandes cambios de nuestra historia fue la adopción de la agricultura y la ganadería. Es el período conocido como Neolítico. Las nuevas formas de vida produjeron importantes alteraciones en el paisaje, aparecieron los primeros poblados estables y parte del bosque fue convertido en campos de cultivo. También se dieron dos grandes avances tecnológicos: la cerámica y la piedra pulimentada. En las vitrinas podemos ver objetos que atestiguan esto: fragmentos de cerámica, dientes de hoz, hachas pulimentadas o un molino de mano.
A partir de este momento se dan los primeros enterramientos que conocemos en Álava. Estos se realizaban en cuevas, abrigos y monumentos funerarios como los dólmenes, que son los primeros ejemplos de arquitectura en Álava que han llegado hasta nosotros. La exposición dedica varias vitrinas a los objetos con los que eran enterrados los muertos: cerámicas, puntas de flecha, puñales y varillas de cobre, collares o los misteriosos ídolos espátula entre otros. Entre todas las piezas destaca un cráneo con una punta de flecha clavada en su base, y que es una de las evidencias de violencia más antiguas de nuestra historia.
Los primeros objetos metálicos aparecen precisamente en estos enterramientos durante el Calcolítico, pero será ya durante la Edad del Bronce cuando el metal empiece a tener una mayor presencia; armas, hachas y pulseras se abren paso entre las cerámicas.