PD_009_Miliario - arkeologiamuseoabibat

Los miliarios eran una especie de señales de tráfico de época romana. Habitualmente se colocaban  cada milla romana (unos 1.480 metros) y servían para indicar la vía por la que se transitaba y otros datos de interés, como la distancia a núcleos de población o el nombre de los responsables políticos del momento.

Este ejemplar nos cuenta que fue erigido por orden del emperador Póstumo, entre los años 258 y 262 de nuestra era:

[I]MP(ERATORI) CAE[S(ARI)]

[M]ARCO CA[S]

[SI]ANO LAT[I]

[N]IO POSTVMO

AVG(VSTO)

Al emperador César Marcus Cassianus Latinius Postumus Augusto.

La expansión del poder y la influencia de Roma no puede ser comprendida sin la existencia de una compleja red de calzadas y vías de comunicación que garantizaba la conexión (y con ello su integración y control) entre todos los territorios del imperio.  

Por Álava discurría la calzada Iter 34, que unía Burdigala (Burdeos) con Asturica Augusta (Astorga). Aunque desconocemos el trazado exacto, sabemos que la via entraba por la Llanada Occidental por una ciudad que se llamaba Alba, para continuar hacia Tullonium en Alegría-Dulantzi, Suestatio en Arkaia, Veleia en  Villodas-Trespuentes, hacia Deobriga, muy cerca de Miranda de Ebro, ya en la provincia de Burgos.

En estos puntos había una especie de estaciones de servicio, llamadas mansio, para acoger a las personas que recorrían estos caminos. En estas mansio existían diversas infraestructuras para aliviar la dureza del viaje: termas públicas, como las documentadas en el yacimiento de Arkaia o instalaciones para el mantenimiento de las propias vías y del servicio de postas, clave para garantizar el correo imperial, como atestiguan los restos hallados en Mariturri, dentro de la propia ciudad de Vitoria-Gasteiz.

Además de esta gran ruta en sentido este-oeste, existían otras que comunicaban el interior del nuestro territorio con la costa cantábrica y el valle del Ebro, y en cuyas inmediaciones se han descubierto otros asentamientos romanos, como Las Ermitas en Espejo, o Aloria en las cercanías de Orduña.